PASTA QUEBRADA CLÁSICA
Variedad de pasta quebrada, crujiente, sin leudado, indicada para la elaboración de bases de tartas, tartaletas y otros. El reposo en frío, contribuye a evitar el leudado de la masa y la suaviza para mejorar el moldeado y evitar grietas.
INFORMACIÓN TÉCNICA
Complejidad: *
Acondicionamiento: 10 min
Reposo en frío: 30 min
Producto: 500 g de pasta
INGREDIENTES
2 tazas (250 g) de harina de trigo todo uso (0000)
¼ taza (50 g) de azúcar refinada
¼ cdta (1,2 g) de sal
¾ taza (150 g) de mantequilla sin sal, fría
1 yema de huevo
¼ taza (4 cdas) de agua con hielo
½ cdta (5 ml) de esencia de vainilla
Harina de trigo todo uso para espolvorear
1 clara de huevo para barnizar
PREPARACIÓN
Pasta quebrada clásica
1. Cernir en un bol la harina de trigo con el azúcar y la sal.
2. Agregar mantequilla bien fría, picada en lonjitas.
3. Unir la mezcla con un par de cuchillos o una batidora eléctrica a velocidad mínima, hasta formar una mezcla arenosa.
4. Agregar yemas de huevo y después el agua con hielo y la vainilla, por cucharadas, uniendo con la yema de los dedos.
5. Volcar la masa sobre una mesa enharinada, amasar durante 2 minutos o hasta unir bien y formar una bola.
6. Colocar la bola de masa en una bolsa de plástico y dejarla reposar en la nevera durante 30 minutos.
7. Al cabo del tiempo, la masa se puede utilizar de inmediato o guardar.
Para armar las cortezas
8. Enmantequillar dos moldes para tartas, de unos 28 cm de diámetro x 3 cm de alto, preferiblemente desmontables.
9. Precalentar el horno a 150 °C (300 °F).
10. Trabajar un poco la pasta quebrada con las manos, para ablandarla. Colocar la pasta quebrada sobre una mesa enharinada. Aplanar con el rodillo hasta llegar a ½ cm de grosor, dando forma redonda, con unos 36 cm de diámetro.
11. Cubrir el molde, pegándola bien en los bordes y pasar un rodillo para emparejar la orilla. Pinchar bastante la pasta con un tenedor, para evitar que se abombe.